Con multitud de soluciones multimedia disponibles como Raspberry Pi, discos duros multimedia, Smart Tv, equipos HTPC… la utilización de un NAS como centro multimedia queda en entredicho, especialmente, si analizamos los precios de estos dispositivos. Puede parecer que el HS-210 es un equipo anti-económico ya que ronda los 270€ sin discos pero, por ese precio, Qnap aporta algo más que un NAS, dándole valor añadido con la potencia de su software. Si lo comparamos con modelos similares de rivales como Synology, es cierto que su precio se antoja algo elevado, tendiendo en cuenta que ambos ofrecen similares prestaciones. Este se prevee como el principal handicap a la hora de plantearnos la adquisión del HS-210.
Otro aspecto que debemos reseñar es la ausencia de un puerto HDMI y mando a distancia (solución que podemos abordar con la aplicación Qremote). Si Qnap estaba pensando en este equipo como un NAS para el salón, habría aportado valor añadido la inclusión de este tipo de conexión en el mismo. En este sentido, la marca ya ha puesto en el mercado el HS-251 que, además de contar con un “potente” hardware INTEL, también incorporará esta conexión, al igual que ya vimos en el TS-269L. En este sentido, también penaliza el que su fuente de alimentación sea externa, con los problemas que ello ocasiona, pero entendemos que esta decisión ha sido tomada en pro del diseño.
Pero al margen de estos aspectos, consideramos que los de Taipei han dotado al equipo con muchos puntos positivos. En primer lugar, destacar su meticulosamente cuidado diseño plano que, además, cuenta con la ausencia de ventilación por aire. Se podría decir que la apuesta del fabricante por el minimalismo nos parece del todo acertada y hará que encaje a la perfección con nuestro hogar digital. A esto hay que añadirle que la instalación de los discos duros en el mismo es realmente sencilla. Únicamente deberemos retirar su parte frontal, colocar la tornillería y empujar. Unos pocos pasos después estaremos listos para la utilización de nuestro equipo.
Su hardware no desmerece en absoluto ya que, aunque se trata de una inversión que puede antojarse elevada, este cumplirá con creces las necesidades que el Turbo System exige. El sistema “fanless” puede ser uno de sus puntos más destacados ya que muy pocas soluciones del mercado ofrecen ese bajo nivel de sonoridad (15dB). Este nivel de decibelios puede verse aún más reducido si optamos por la instalación de discos SSD.
El Hs-210 nos ofrece una solución para nuestro salón que, a falta de los aspectos comentados anteriormente, cumple con creces nuestras necesidades de almacenamiento y reproducción de contenidos multimedia. En este sentido sus competidores deberán apostar por mejorar el diseño de sus productos, como Synology cuyo catálogo no cuenta con dispositivos de atractivo diseño. El software es su aspecto más destacado y, dada la integración con dispositivos móviles no sencontramos con el mejor dispositivo en este sentido.