Hoy mismo sale a la venta la nueva entrega de la popular saga de Activision, Call of Duty. Por ello, AMD ha actualizado sus drivers, para ofrecer soporte para este nuevo Call of Duty: Infinite Warfare así como la remasterización de Modern Warfare que llega junto a este.
Como siempre, esta nueva versión de drivers para las tarjetas gráficas de AMD podrá ser descargada tanto desde la web de este como desde el propio Crimson Software. Será compatible con todas las versiones de Windows 10, Windows 8.1 y Windows 7, tanto de 32 como de 64 bits. Os recordamos que se trata de una versión beta, así que puede que no sea cien por cien estable.
Problemas solucionados
Además del soporte para las dos nuevas entregas de Call of Duty, ahora también podremos activar el perfil CrossFire para TitanFall 2 en DirectX 11, el cual salió a la venta la semana pasada. El único juego en el que se han solucionado los problemas ha sido The Division, en el cual después de largos periodos de juego se quedaba congelado usando el perfil de CrossFire. Este mismo error tenía lugar en Battlefield 1.
La actualización de los drivers de AMD no se limita a juegos. Por ejemplo, las tarjetas R9 390 tenían problemas de congelamiento durante la ejecución de Unigine Heaven en OpenGL que han sido solucionados. Para “streamers”, esta nueva versión también es interesante, ya que el famoso programa de emisión on-line, OBS, sufría pequeños parones que se daban al ver contenidos web.
Fallos conocidos
Por desgracia, no todos los problemas de los drivers de AMD han sido resueltos en esta actualización y aún tendremos que esperar a otra actualización para que esto sea remediado. Muchos juegos siguen teniendo problemas con Vulkan, como puede ser Dota 2. Además, tanto Fifa 17 como Overwatch pueden causar pequeños artefactos en pantalla usando el perfil CrossFire. Bettlefield 1 también se ve afectado, ya que a veces aparece un mensaje indicando que la tarjeta ha sido extraída al iniciar el juego, aunque son casos muy aislados.
