Como ya adelantamos hace unas semanas atrás en exclusiva primicia, HyperX se independiza, toma su andadura en solitario, tras nacer como una prueba, como un “que será” y acabar copando el mercado y acoger su hueco estableciéndose en este, de la mano de Kingston como su gama insignia, su buque insignia de alta gama, el que todo entusiasta deseaba tener. Pues bien, desde este mes de Abril, como adelantamos, HyperX vuela sola, como marca independiente, se despega de mama Kingston, se realiza un lavado de cara, se reinventa y remasteriza algunas gamas clásicas, de la antigua serie, como nuevas gamas adaptados a las tendencias actuales del mercado y su publico, el #hardwarefilico.
La semana pasada, los que nos seguis por las redes sociales y si no lo haces ya tardas vieron en primicia nuevamente, no solo información de las próximas DDR4 si no la tendencia que estas llevarán, así como las memoria que hoy os traemos en analisis, las HyperX Fury, las primeras memorias presentadas en solitario por parte de HyperX con su primer lavado de cara, dado que Fury, son las antiguamente conocidas como Kingston HyperX Blue, que eran la gama baja de la gama alta, a las cuales HyperX no solo les ha cambiado su disipador, adaptándolo a un concepto mas minimalista y compatible con las refrigeraciones actuales, si no que también las ha sacado tocadas internamente pasando del estándar 1600 al 1866Mhz, que marcan el principio del cambio hacia el camino sin escalas hacia el DDR4.