Una semana después de que AMD reveló por primera vez su nueva tarjeta gráfica R9 Nano, van llegando más detalles acerca de las versiones de la tarjeta de los partners autorizados de AMD. A diferencia de la gráfica insignia R9 Fury X, la R9 Nano, basada en el mismo chip Fiji, contará con soluciones personalizadas. Según la fuente, las tarjetas personalizadas llegarán en algún momento en el Q4 de 2015, o dentro de los próximos 3 meses.
Teniendo en cuenta que la fury X está bloqueada en términos de tarjetas personalizadas, muchos esperan estas R9 Nanos personalizadas permitirían tarjetas Fiji completas con mejores VRM y PCB, diseñadas para permitir un mejor overclocking. Por desgracia, la información que ha salido a la luz sugiere que AMD está restringiendo cualquier cambio en las especificaciones, sólo permite cambios en la refrigeración. Esto significa que el overclocking en la R9 Nano, probablemente, se verá limitado por el conector de 8 pines y la solución VRM antes de que por problemas térmicos.
Una de las razones de AMD por las que restringe las modificaciones es que quieren mantener el TDP y consumo bajo control. Esto se debe probablemente a la campaña de marketing que AMD ha hecho por la R9 Nano, con un enfoque en la eficiencia y su reducido factor de forma. Permitiendo soluciones personalizadas que desprendan mucho más calor, con el nivel de eficiencia reducido y demasiado grandes, perdería gran parte del nicho que la R9 Nano está generando. Otra razón es que AMD probablemente no quiere que la R9 Nano pueda superar su buque insignia, la Fury X.
Con todo esto en mente, la R9 Nano no debería estar limitada por el VRM o la PCB en la mayoría de escenarios de overclocking. Si los disipadores personalizados son capaces de superar al disipador de fábrica, deberían ofrecer, sin problema alguno, más margen de overclocking. Sin embargo, estas tarjetas personalizadas correrían a la par con la Fury X, que cuesta lo mismo que una R9 Nano de referencia. Los partners tendrán que encontrar una solución térmica que al menos pueda coincidir con la Fury X, sin ser demasiado grande o más caro que la R9 Nano de referencia para ser competitivos. Mientras que AMD está siguiendo el ejemplo de Nvidia en la restricción de cambios en las tarjetas insignia, queda por ver si esta estrategia dará sus frutos.